Este es un momento de extrema sinceridad. Una semana antes de mis días y durante, no me tomo muy en serio lo que pienso o lo que siento, porque sencillamente parezco otra persona. Sin embargo, creo que esa dosis extra de sensibilidad es un super poder que nos da Dios para detectar lo que en otros momentos descuidamos.
(¿O tal vez estoy tratando de darle un sentido trascendental a lo que es una simple tortura china?).